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Invitada por sus amigos a participar en la Elección de la Reina del Carnaval de Mazatlán 2013,  Lidia  decidió inscribirse y al mismo tiempo asistió a clases de oratoria y modelaje para prepararse en la víspera del concurso.Contenta y emocionada,  el día del certamen la joven  salió al escenario hecha un manojo de nervios  pero al enfrentar al público se sintió segura de salir airosa de la contienda.  Las siguientes  pasarelas fueron más relajadas.
Hoy viernes 8 de febrero,  Lidia Rojas recibe la corona que la convierte en  Reina de los Juegos Florales del Carnaval Internacional Mazatlán 2013. La ceremonia será en el estadio Teodoro Mariscal e iniciará a las 20:30 horas.
Ella lucirá un vestido real de corte inglés en color verde ivory.
“Me encantó el vestido,  verlo completo, con corona y accesorios me  emocionó, estoy  muy agradecida con Sodelva por haberle echado tantas ganas, igual con Rigo Lewis,  ya me subí a mi carroza  y no me quería bajar,  ya quiero que me coronen y  saludar  desde mi carroza”.
Bordado en  perlas, chaquiras,   abalorios y  canutillos,  el vestido fue  confeccionado por  Sodelva Ríos de García y su equipo de colaboradoras que trabajaron  durante largas jornadas en un taller de la colonia Ferrocarrilera.
En la prueba de vestuario Lidia se mostró contenta, satisfecha  y ansiosa  en la víspera de su coronación.
“Aunque mi meta era ganar el concurso, cuando me nombraron  me sentí realmente emocionada, de repente no reaccioné, me quedé parada sobre el escenario, pero cuando cerraron el telón,  grité de emoción”.
“La emoción nos ganó a Karen y a mí,  durante la contienda  nos hicimos muy amigas y apenas un día antes comentamos lo agradable que sería ganar las dos, así es que cuando nos nombraron, no lo podíamos creer”.
En lo personal, el reinado de los Juegos Florales me  va a servir mucho porque voy a crecer como persona,  conoceré otras ciudades,  me voy a desarrollar socialmente, estoy en una etapa muy bonita, esto me ha traído mucha felicidad,  pero también voy a servir, quiero  ayudar a las comunidades marginadas y para lograrlo  Karen y yo,  tenemos un proyecto”.

Éste artículo fue publicado en Prensa. .

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