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Allí, las vidas de dos creadores teatrales, Seki Sano y Julio Castillo, desfilaron en imágenes para ilustrar algunos de los momentos más edificantes e intensos de las artes dramáticas en el país.“Seki Sano. Vida y teatro” , realizado por Eugenio Cobo, fue un acercamiento a la vida y obra del actor, director y coreógrafo japonés, a partir de los testimonios de los actores Ana Ofelia Murguía, Mercedes Pascual, Wolf Rubinskis, Graciela Doring, Jorge Berry y Juan Felipe Preciado, conducidos por la investigadora Michiko Tanaka.
Provocador, misterioso y comprometido con su tiempo, Sano inyectó al teatro nacional una visión particular plagada del gran impulso imaginario que la tradición nipona brindó a su quehacer artístico.
Por su parte, “Ciudad infierno. El teatro de Julio Castillo”, también de Eugenio Cobo, es una realización que se adentra en la vida y obra del director escénico mexicano que logró capturar, al cabo de más de 40 puestas en escena, algunos de los momentos poéticos más intensos del teatro mexicano.
Caracterizado por una clara preocupación social y el vuelo imaginativo de sus escenificaciones, este teatro anticipó con gran pertinencia las formas de la degradación de la vida en la ciudad de México y buscó desesperadamente la redención de una niñez condenada a vivir en sus estratos más bajos.
Esta presentación y la que se ofrecerá este sábado 27 de septiembre, completarán la participación del CITRU en Escena Mazatlán 2014, en su esfuerzo por acercar al público porteño a la gran historia del teatro mexicano a través de sus principales creadores.
 

Éste artículo fue publicado en Prensa. .

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