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En esta ocasión, para finalizar las actividades el Festival Internacional de Teatro Escena Mazatlán 2014, el dramaturgo sonorense Carlos Iván Córdova estuvo presente para hablar a detalle del libro “Teatro de la Gruta XIII”, editado por Fondo Editorial Tierra Adentro, del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, la colección de autores jóvenes más importante del país.El volumen reúnen cinco piezas teatrales realizadas por dramaturgos nacidos en los años 80: “Mi amigo, el ventrílocuo y yo” de Jorge Caballero Vega, “No será la luna”, de Jesús Ramírez Ferreiro, “Visitas diurnas a noctámbulos y lactante” de Ivi May, “La casa del toro”, de Juan Carlos Delgado y “Mujeres sin cuello”, de Carlos Iván Córdova, obra que lo llevó a ganar en 2013 el Premio Nacional de Dramaturgia Joven Gerardo Mancebo del Castillo.
Para que el público tuviera un acercamiento directo al trabajo del libro, el director y maestro del Centro Municipal de Artes de Mazatlán Javier Díaz Dalannais preparó una lectura dramatizada con la participación de las actrices Ana Laura Rincón y Anaid Díaz Baldenegro.  
Tras la representación, la actriz Anahí Juárez y el director Jorge Gorostiza tocaron algunos aspectos fundamentales de las cinco obras que componen esta antología, destacando la diversidad de las propuestas, una constante presencia de personajes carentes de emociones, la intensa presencia de la soledad, el sexo y la violencia,  y también la lucha de poderes y el conflicto como eje de las relaciones humanas.
Carlos Iván Córdova señaló que “Mujeres sin cuello” gira entorno a la relación entre una enfermera y una adolescente que carece de extremidades. Sin embargo, lejos de ser una mujer indefensa, la “Niña tronco” es un personaje dominante, manipular y dotado de sentidos poderosos que le permiten conocer a fondo el alma de quienes la rodean.
Sin timidez, el autor desnudó el origen de su texto, las influencias que han marcado su trabajo, destacando a los sinaloenses Oscar Liera e Inés Arredondo y señaló que su apuesta creativa está orientada a un teatro que sea capaz de exponer la complejidad del ser humano sin necesidad de moralizar u ofrecer una enseñanza concreta.
La parte final de la presentación estuvo acompañada por preguntas del público que permitieron que el autor y los presentadores reflexionaran sobre la historia del teatro en México, haciendo énfasis en su etapa actual en la que, coincidieron, existe una nueva generación de dramaturgos que están dotando de vitalidad, inteligencia y nuevos lenguajes al teatro nacional. 

Éste artículo fue publicado en Prensa. .

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