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A través del Instituto de Cultura de Mazatlán, Julio Recinos,  organizador del Mazatlán Jazz Fest, trajo de nueva cuenta  a uno de los más destacados artistas de este género en México para refrendar que el puerto es una tierra ideal para el jazz.A sus 29 años Gerry López es considerado uno de los músicos más importantes de su generación a nivel internacional, y junto al pianista David Villanueva y al baterista Reynier Limonta, el chihuahuense derrochó el alto rigor técnico que ha aquilatado en su excepcional trayectoria junto al vigor y vitalidad que despliega tan pronto su boca toca el sax.
Con temas de su autoría como “Time line” o “Let´s cool one”, estándares de jazz como “I remember Clifort” o temas contemporáneos como “Adelita”, de Robert Walter; López, Villanueva y Limonta desplegaron un sonido compacto, improvisaciones intensas y mesuradas y sobre todo, un gran gozo reflejado en sus rostros y en la fluidez con la que llevaron este concierto de principio a fin que llegó con el encore “Aguachile blues”.
De pasajes melódicos a evocaciones románticas, y de momentos de explosividad y juego el No Trío Jazz conectó con las emociones del público porteño que aplaudió, movió sus cuerpos y vitoreó a los artistas en una noche íntima, coloreada por luces azules y doradas, que volvió a hacer de Mazatlán la tierra prometida del jazz en el pacífico mexicano.
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Great Night of Jazz with Gerry López and his No Trio Jazz As part of his “Mexico Tour 2017”, saxophonist Gerry López and his No Trio Jazz offered a huge Jazz night this Thursday at Casa Haas with a cool and dynamic concert. Through the Instituto de Cultura de Mazatlan, Julio Recinos, Mazatlan Jazz Fest Organizer, brought new account to one of the most prominent artists of this genre in Mexico to endorse that Mazatlan is an ideal place for Jazz. 29-year-old Gerry López is considered one of the most important musicians of his generation at an international level, and with pianist David Villanueva and drummer Reynier Limonta, the Chihuahuan demonstrated the high technical precision that has improved his outstanding career with vigor and vitality that unfolds as soon as he blows on the sax. With songs such as “Time Line” or “Let´s Cool One”, standards of jazz as “I Remember Clifort” or contemporary songs like “Adelita”, by Robert Walter; Lopez, Villanueva and Limonta deployed a compact sound, intense and measured improvisations, and above all, a great joy reflected in their faces and the fluidity with which carried this concert from beginning to end that came with the encore “Aguachile blues”. From melodic passages to romantic evocations, and moments of exp

Éste artículo fue publicado en Prensa. .

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