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Con banquitos y escaleras, con coloridos atuendos o un vestuario casual, las familias porteñas y turistas ocuparon habitaciones, azoteas, camellones, banquetas y cualquier lugar posible para aplaudir la creatividad, algarabía y amor que cientos de entusiastas artistas plasmaron en comparsas, carros alegóricos, conjuntos musicales y extravagantes disfraces para hacer reír y suspirar de asombro a miles de espectadores que abarrotaron el paseo costero.Para calentar el ambiente la avanzada comercial alebrestó a la multitud con regalos, música, bailes y coloridos personajes que hicieron que los patasaladas se acercaran a las empresas que, a través de sus aportaciones, hacen posible que el Carnaval de Mazatlán crezca en calidad.
Posteriormente el primer petardo reventó en el cielo y la colosal comitiva organizada por el Instituto de Cultura de Mazatlán, integrada por 31 carros alegóricos, comparsas de concurso y de exhibición, mostró la flora y fauna, la historia, el folclore, los íconos culturales y artísticos que “La Perla del Pacífico” ha entregado a México y el mundo.
Las cuatro carrozas reales creadas por el maestro Francisco Igartúa marcaron los diferentes tonos del desfile: en la Carroza Real, SGM Alexa I, Reina del Carnaval 2018 impuso la magnificencia y el esplendor bajo el signo de “El Venado”; SGM Sofía I, Reina de los Juegos Florales 2018, tuvo a “El mango” como ícono del ánimo esforzado y generoso de la tierra sinaloense; “El Pez Vela” en la carroza de Gretel, Reina Infantil 2018, fue símbolo de la espontaneidad e imaginación de los patasaladas y el rubicundo “Camarón”, fruto popular del mar, representó el inagotable ánimo del Rey de la Alegría, que tiene en Tulio Martínez a un digno embajador.
Junto a las creaciones de Igartúa, que dio vida a alegorías compuestas por ingeniosos mecanismos (como el faro de la carroza real); bellas y sencillas esculturas (como el barco camaronero del Rey de la Alegría) o coloridas e imaginativas obras (como la exuberante carroza de los Juegos Florales o el vistoso y alegre carro de la Reina Infantil), los maestros Jorge González Neri y Jorge Osuna no escatimaron en creatividad para plasmar amenazadores tigres, bandas musicales, gatos risones, cachalotes desdentados, pinochos tropicales, alucinantes changos, venados azules, trapecistas, elefantes y carpas de circo… un desfile digno para la hambrienta multitud reunida frente al mar.
Junto a los soberanos del Carnaval 2018, hubo en este desfile espacio para homenajear a las reinas y reyes de 25 y 50 años: Patricia Guevara, Reina de Juegos Florales de 1968; Amina Blancarte, Reina del Carnaval 1993; Celia Jáuregui, Reina de Juegos Florales 1993 y Oscar Valdez, Rey de la Alegría 1993. Además, preciosas embajadoras de concursos de belleza de México y el mundo  participaron en este monumental desfile.

Éste artículo fue publicado en Prensa. .

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