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El espectáculo se mantuvo en un constante movimiento perpetuo en torno a cinco coreografías simbólicamente relacionadas por momentos de reflexión, incertidumbre, dolor, rechazo o soledad. En una esfuerzo por concientizar  sobre como México ha ido olvidando sus raíces, la bailarina Diana Bayardo hizo en Timeline un “ritual contemporáneo” con movimientos, suspiros, gritos y golpes a cuerpo para recordar la imagen de sus ancestros.
Christian Jiménez tomó el recurso de unir íntimamente el teatro con la danza para mostrar en Mor/Sutileza del sueño como las personas “se ven ante los ojos de Dios”, al tomar la imagen de un muñeco y reconstruir  su historia frente a una cámara hasta el final de su vida al despedirse con un sentimiento de vacío y perseguido por su pasado.
El chelista Diego Martínez Lanz fue pilar fundamental para que el público presenciara memorables escenas en la coreografía Tiempos inertes, en la cual la bailarina Karen de Luna aprovechó al máximo los ritmos densos de su acompañante con la escasa luz del escenario para colmar la pieza de momentos en los que su cuerpo pareciera estar suspendido por el aire.
En la última recta del espectáculo, Espina de Guadalupe Anaya llevó al público por un paseo en el interior de un alma atormentada que poco a poco fue liberándose de sus ataduras emocionales. Y Mundo basura de la compañía Trashumante Danza Contemporánea cerró la noche con una coreografía en la que vistieron como una especie de reptilianos pertenecientes a un mundo donde sus habitantes están condenados al hacinamiento por la gran cantidad de contaminación que producen.
El II Encuentro de Danza de Mazatlán continuará con presentaciones de danza contemporánea diariamente hasta el día viernes 25 de mayo. Las funciones serán a las 20:00 horas en el Teatro Ángela Peralta.  Boletos $120 pesos disponibles en la taquilla del teatro. Mayor información al teléfono 982 44 46 ext. 103.
 
 
 
 
 

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