La tradicional Misa de Réquiem para coro, solistas y orquesta presentada por el Instituto de Cultura de Mazatlán en el Teatro Ángela Peralta en la víspera del Día de Muertos, fluyó bajo la experimentada batuta del maestro Percival Álvarez.Casi 80 voces y 28 músicos hicieron posible esta gala musical para recordar a quienes se adelantaron en el camino terrenal.
Aunque es la primera vez que dirige el Réquiem de Fauré, Percival Álvarez, director de la Escuela Superior de Música y Canto del Instituto de Cultura de Mazatlán, asumió la dirección musical con la enorme convicción de salir airoso en la conducción de una obra que había querido dirigir desde hace años.
A diferencia del Réquiem de Verdi o de Mozart, la particularidad del Réquiem de Fauré es que a pesar de seguir la tradición litúrgica católica, la composición musical no ve a la muerte como algo oscuro, triste o con mucho pesar, sino como un proceso hacia algo mejor.
En este contexto el también director de la Camerata Mazatlán guió con certeza a los músicos y tuvo cuidado de trabajar con las voces del monumental coro.
Y mientras coro y músicos recreaban esta gran obra, el público pudo disfrutar la música y trasladarse hasta el cielo que apareció en imágenes llenas de luz y paz.
Durante el Réquiem el público traspasó el marco litúrgico para disfrutar una misa alegre donde a diferencia de los autores que hablan de la vida y la muerte, la sombra y la oscuridad, la música de Fauré conduce hacia la luz.
Destacó la participación de la soprano Eimy Sánchez, el tenor Brian Lawrence y el barítono José Miguel Valenzuela que supieron transmitir la idea de que con la muerte hay que experimentar regocijo porque es llegar al origen de una mejor vida.
Al inicio del programa la Camerata Mazatlán reforzada con músicos invitados de la Orquesta Sinfónica Nacional, la Orquesta Filarmónica Nacional, la Sinfónica de Xalapa y la Sinfónica de la Universidad de Guanajuato, interpretó l Crisantemi.
La elegía para cuerdas fue compuesta por Puccini al enterarse de que un amigo suyo había muerto.