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Coproducido por Albricias Producción y el Fondo para la Producción Cinematográfica de Calidad, el segundo largometraje de Alejandro Gerber,  tuvo una buena acogida el pasado domingo  entre el público que puntual ocupó su butaca en el Teatro Ángela Peralta.En punto de las 18:00 horas  inició la proyección sobre una megapantalla.  La historia que comenzó a escribirse hace cinco años, es un interesante recorrido de varios kilómetros por algunas zonas del País.
Con reconocimientos internacionales por ésta, su segunda película, después de Vaho,  Alejandro Gerber Bicecci recurre a dos personajes centrales, los hermanos adolescentes Omar y Karina, quienes de regreso al hogar materno  y luego con la abuela,   atraviesan los más agrestes y desolados caminos de México, azotados por  la violencia.
Desde el Distrito Federal, luego Oaxaca, hasta Paquimé cerca de Casas Grandes, Chihuahua,  en su recorrido los hermanos se dan cuenta que deben acompañarse y protegerse.
A su paso encuentran desde una manifestación con hombres y mujeres armados en protesta por la masacre de 39 campesinos en Oaxaca, hasta  un hombre colgado en un puente de Chihuahua.
Para la realización de esta película, dos fueron las ideas centrales del director:  descubrir  el significado de tener un hermano en una situación de emergencia – la necesidad de regresar con los suyos porque su madre está enferma-  pero  en el camino se topan con una sociedad convulsionada ante la falta de orden público y la irrupción del narcotráfico.
Situaciones de abuso e inseguridad los hacen madurar y conocer ese México marcado por la miseria, el abuso, la ausencia de orden público, el mercado de las drogas, la prostitución, los asesinatos y la absurda muerte de niños en medio del enfrentamiento social.   Ante el  caos, los hermanos asumen la responsabilidad de cuidarse para  sobrevivir y llegar a su destino.
Otro aspecto que subraya Viento aparte  es el resentimiento social que se está generando entre los mexicanos en momentos de crisis nacional y para ello recurre a diferentes personajes con los que se van topando los hermanos.
En la película  todos los personajes  tienen como común denominador, el no ser quienes realmente son.   Un zapoteco que se dice migrante; un trailero de Chihuahua que afirma ser del Distrito Federal, entre otros,  que en su postura reflejan la inconformidad y el deseo de no pertenecer a comunidades donde impera el caos entre sus habitantes.
Al final de la proyección el director Alejandro Gerber Bicecci agradeció a los organizadores de Cineseptiembre por apoyar al cine independiente  y compartió su enorme satisfacción por la realización de Viento aparte, películ

Éste artículo fue publicado en Prensa. .

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