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En el escenario cuatro personajes (Ángel, Raúl, El Chino y Jazmín) desarrollaron una compleja dinámica en la que expusieron, de manera abstracta, la necesidad de pertenencia en el ser humano, y también la exigente demanda de ser ellos mismos.Con una propuesta dancística más apegada a lo sensitivo, al juego y a la imaginación, “FIT/MISFIT” dejó a un lado las apuestas técnicas y buscó sumir al público en una atmósfera dominada por una soberbia iluminación: destellos de luz, matices y juegos de sombras que permitieron que los movimientos de los bailarines lucieran aún más.
Los intérpretes (Ángel Arámbula, Raúl Navarro, Humberto Vega y Jazmín Chiodi), enfundados en un inicio en vestimentas negras, pasaron de los movimientos lentos y dubitativos, a estallidos de energía que acompañaron con cambios de vestuario: prendas coloridas, frescas, graciosas, un gesto de la expresión de su carácter individual.
Sin lugar a dudas, otro aspecto esencial de la propuesta fue la música, una fusión de géneros que por momentos recordó las emblemáticas bandas sonoras de Quentin Tarantino, se sumergía en ritmos de folk, rock y música electrónica, y también retomaba los sonidos de tambores y gaitas de la música tradicional irlandesa.
El público despidió al bailarines con un fuerte aplauso, agradeciéndoles que el Festival José Limón 2015 abriera en Mazatlán con el pie derecho, augurando espectaculares presentaciones hasta el final del evento, el próximo domingo 19 de abril.

Éste artículo fue publicado en Prensa. .

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