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El Piano y el violín fueron los instrumentos que brillaron en esta tarde de julio en las manos de un talentoso grupo que ofreció piezas de alto nivel técnico y que, además, permitió apreciar las dotes interpretativas que ya les permiten ir más allá de la rigurosa lectura de una partitura. 
Alejandra Beltrán Ramón, José Miguel Aguirre Pérez y Sergio Castellanos García ejecutaron al piano piezas de carácter compositores románticos como Manuel M. Ponce, Sergei Rachmaninoff y Frédéric Chopin; además, ya entrados en el calor de las notas, Alejandra y José Miguel ejecutaron a dúo tres piezas de Maurice Ravel; mientras que Sergio Castellanos tuvo la dura labor de interpretar en solitario el “Concierto para piano y orquesta en Re bemol mayor” de Aram Khachaturian.
 
Por su parte, en una muestra de exquisitez y a manera de desafío, Juan Pablo Quintero Osuna interpretó al violín el “Concierto Nº 22” de Giovanni Battista, un derroche de técnica y emotividad que fue acompañado por el maestro Antonio González al piano para dar mayor presencia a esta imponente obra.
 
Para mantener el peso del violín en el recital, el joven Alain Chenier Valencia Rea mostró su madurez como intérprete con “Chacona” de Antonio Tomaso Vitali, pieza plagada de energía y muchos contrastes que revelaron la fortaleza de este joven músico.
 
El recital cerró entre atronadores aplausos de parte del público, compuesto por familiares y amigos que celebraron la vida musical de este grupo que promete seguir formándose como artistas de excelencia en las aulas de la Escuela de Música del Instituto de Cultura de Mazatlán. 

Éste artículo fue publicado en Prensa. .

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