La compañía “El rinoceronte enamorado” y la Compañía Nacional de Teatro estrenaron en Mazatlán La injusticia, puesta en escena que revive las esperanzas, anhelos y desilusiones de los grupos guerrilleros que en la década de los 70s encabezaron una lucha social revolucionaria en México.
La obra formó parte de la cartelera del Festival Internacional de Teatro Escena Mazatlán 2017, organizado por el Instituto de Cultura de Mazatlán y provocó una reflexión en torno al periodo gris de los grupos armados que sucumbieron ante el debate interno entre las tendencias militares y las que privilegiaban el trabajo político de masas.
Basada en la obra “Los justos” de Albert Camus y en diversos documentos sobre el movimiento armado en México en los años 70, La Injusticia revive el drama de los grupos armados que se fueron a la clandestinidad para responder a la cerrazón del régimen gubernamental.
La obra creada por “la compañía de compañías” transportó al público a un pequeño cuarto donde “Fidelia”, “José”, “Juan”, “Moreno” y “Raymundo” planean la ejecución de un personaje político que les permita avanzar en su lucha social.
De esta forma Diana Fidelia, Lizandro Cisneros, Ricardo Moreno, Antonio Orta y Jesús Coronado, dan vida a esta célula que no está dispuesta a conformarse con denunciar las injusticias y atropellos que cometen los gobernantes del país y, arriesgan su vida por combatirlas.
En poco más de una hora La Injusticia plantea una atmósfera en la que factores como el miedo, la falta de confianza, la sed de justicia y las constantes confrontaciones de los miembros ponen en peligro la misión del equipo y dejan ver los verdaderos cimientos y alcances éticos que conlleva organizar una revolución.
El drama se centra en una discusión sobre si crear un halo de esperanza a partir de un crimen en el que inocentes resulten afectados: unos piensan es necesario para el éxito de la misión y otros creen que trastocaría el lema, moralmente correcto, de que “el pueblo los apoya”.
Llegado el final de la obra y los aplausos del público se podía ver el cansancio y emoción de los actores. Su director escénico y autor de la obra, Edén Coronado, fue invitado al escenario y pidió un aplauso para el Director Ejecutivo de la obra: Caín Coronado y para Francis Palomares, quien asistió a la función en nombre de la Compañía Nacional de Teatro.
La función fue dedicada al movimiento de “Los enfermos de Sinaloa” conformado por activistas de movimientos estudiantiles que sufrieron la represión gubernamental.