A las siete de la noche el jardín interior del edificio habitado actualmente por 22 niñas – aunque la población es flotante porque hay nuevos ingresos, o algunas son adoptadas- se llenó de espectadores norteamericanos y mazatlecos que acudieron al llamado del Patronato del Orfanatorio presidido por Gabriela Ramírez.Las diez integrantes del patronato tocaron el corazón de amigos, familiares y personas cercanas por lazos laborales y, mediante la venta de boletos para el concierto, consiguieron fondos para solventar las necesidades de programas específicos del orfanato, en donde sus habitantes reciben amor, asesoría psicológica, atención médica, educación, techo y alimento.
Para la realización del evento fue fundamental el apoyo del Instituto de Cultura de Mazatlán dirigido por Raúl Rico González, quien en palabras de las organizadoras hizo posible el concierto “De Bach a Broadway” a cargo de la Camerata Mazatlán bajo la batuta del maestro Percival Álvarez.
Integrada por músicos de formación clásica, la Camerata consiguió muchos aplausos y el reconocimiento del público con el repertorio elegido especialmente para el concierto con fines altruistas.
La agrupación inició con el Concierto para 2 violines y orquesta de cuerdas en re menor de J.S. Bach y siguió con un repaso de algunos de los momentos más brillantes y conmovedores de los musicales más taquilleros de Broadway.
La audiencia se deleitó con la música de West side story, de Leonard Bernstein; el Hombre de la Mancha, de Mitch Leigh, hasta la música de los Locos Adams de Andrew Lippa; Jesucristo super estrella y el Fantasma de la Ópera de Andrew Lloyd Webber, sin duda el musical más taquillero de todos los tiempos.
Les Miserables de Claud Schönberg y Cats de Andrew Lloyd Webber evocaron el poder de la música para remover conciencias y ponderar el valor de los sueños, la esperanza de renacer a un mundo mejor y la interminable lucha en defensa de los desfavorecidos en el mundo.
Previo al concierto Gloria López Gavito aclaró que el dinero recaudado en el concierto servirá para pagar todo el tratamiento psicológico de las niñas del Orfanatorio, y admitió que reciben otros ingresos de donadores locales y extranjeros que cada mes aportan su granito de arena para gastos de alimentación de las moradoras de la casa.
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