Una intensa alegría baña su voz al recordar los momentos en los que pasó a convertirse en reina del Carnaval en una época en la que la fiesta aún conservaba un carácter eminentemente local. “Cuando gané mi emoción fue tanta que lloré y grité de alegría. No lo podía creer. Estaba en mi casa, luego me trasladé al Ayuntamiento, ahí sentí todo el apoyo de mis paisanos. Fue algo que jamás olvidaré. Para mí haber sido Reina del Carnaval de mi querido Mazatlán ha sido una experiencia muy satisfactoria. Me llena de orgullo haber alcanzado ese sueño, me dejó como lección que vale la pena luchar por lo que quieres, no siempre es fácil conseguirlo, pero con esfuerzo todo está garantizado”.
Vicky señala que su carácter alegre y su facilidad para ser “amiguera” fueron las claves de su reinado, dos cualidades perfectas para representar una fiesta que tiene la misión de ofrecer la cara más luminosa y bullangera de Mazatlán.
“Es un evento muy importante para nuestro queridísimo puerto. Estoy emocionada de volver a vivir la experiencia de mi reinado y volver a convivir con mi gente que tanto quiero”, comparte Vicky quien después de casarse ha formado su vida en Cuernavaca, Morelos y ansía que llegue el día de su homenaje para que sus hijos, nietos y el resto de su familia conozcan cómo se vive realmente el Carnaval”.
“Estoy muy feliz de volver a vivir esos momentos inolvidables junto a todos ustedes”, dice Vicky Tirado con la ilusión del Carnaval de Mazatlán a flor de piel.