Gratitud convertida en aplausos, silencios transmutados en demandas, en exigencias, en protestas, suenan gritos de emoción, de apoyo, de reconocimiento, de esperanza por los que vienen, por los que aún no son, por los que ya fueron y por los que no pudieron ser.
Reconocimiento de todos los asistentes porque los bailarines, los artistas, los estudiantes y los egresados de la EPDM se han entregado con furia, con energía, con solemnidad, con profesionalismo, con dignidad, con capacidad y sensibilidad en todas sus obras presentadas en el Tercer Encuentro de Danza de Mazatlán.
El Programa 5 ofrecido la noche del viernes 22 de septiembre volvió a ser memorable, conmovedor, esperanzador.
Kenia Navarro con su pieza “Fantasía Plástica” transmitió una protesta enérgica por la contaminación de los mares y océanos con los desechos plásticos que destruyen o dañan los ecosistemas marítimos.
“Un día a la vez” de la compañía “El cacerolazo danza” fue interpretada por Lucía y Talya Sato con iluminación amarilla y azul y polka rusa de fondo musical para mostrar sincronía, armonía y facilidad de movimientos (técnicas para nada simples).
“Erosión” con coreografía e interpretación de José Ángel Rochín mostró el proceso artístico y humano que se modifica con el tiempo, expresó verbalmente la inseguridad y el agobio de la ansiedad que no permiten la expresión de ideas, una pieza en la que la improvisación es parte fundamental, su otro elemento es la mímica para exteriorizar y construir el presente, el pasado o el futuro deja de contemplarse.
El coreógrafo José Luis Pacheco presentó “Un día difícil” pieza inspirada en los obreros de la industria aguascalentense; la obra transmitió el cansancio y el agotamiento constante en ellos, con música de sonidos industriales y música tradicional japonesa en referencia a que en Aguascalientes las fábricas instaladas en su mayoría vienen de Japón.
Hannah Valle, coreógrafa, presentó “Idek”, pieza que desborda furia y energía a ritmo de percusiones vibrantes, inspirada por un duelo, lo más significativo en esta obra es que en ella están presentes seguras promesas artísticas de la EPDM.
Para concluir la noche se presentó un video de Francisco Córdoba titulado “Homenaje a Maximiliano Corrales”, hubo un silencio devastador, hacer una crónica del momento sería impertinente, lo que resta escribir es que “Max” dejó un ejemplo impecable de amor a la danza contemporánea.
