Drama, amor, desamor y lujuria, fueron los elementos que estuvieron presentes en las obras de teatro “Matrimonio” y “El hombre de latón”, melodramas escritos por el dramaturgo José Cuevas, y que el colectivo Sin Etiquetas llevó a escena para brindar un gran espectáculo en Casa Haas en una noche de la Temporada Primavera 2024.
En un evento para recordar, actores, directores y staff, realizaron un homenaje al maestro Cuevas por el motivo de su 40 aniversario de carrera artística haciendo, produciendo y creando teatro, puestas que concluyeron con ovaciones del público que se dio cita en el recinto cultural situado en la calle Mariano Escobedo.
Fue con la obra “El hombre de latón” con la cual inició la velada de artes escénicas, pieza que fue dirigida por el homenajeado.
Protagonizado por Sebastián Sánchez, Ana Karenina y Fernando Barraza, la historia nos lleva a una casa abandonada, donde en una especie de purgatorio se encuentran tres espíritus quienes en vida fueron familiares, entre ellos estaba el padre desalmado, verdugo, egoísta y abusador, junto a su hijo e hija, seres quienes buscaban venganza de lo que les hizo en vida.
En la trama los hijos a cada instante le recodaban a su progenitor todo el mal que les hizo, cuando él era desobligado, alcohólico y un abusivo, mensajes que calaron hondo y causaron desagrado, al estar condenados a vivir en ese limbo los descendientes se alían para cobrar todo el daño y sufrimiento que les causaron.
La segunda historia de la noche fue “Matrimonio”, la cual estuvo dirigida por Christian Rodríguez, protagonizada por él mismo en compañía de Laura Ríos, teniendo participación especial Sebastián Sánchez.
Con una excelente producción musical y de iluminación, el drama abordó la relación desgastada y tóxica de una pareja que por varios años estuvo junta, esa unión que intenta acabar con su soledad y vivir en pareja con distinto carácter, así como gustos, quienes buscan la felicidad, misma que está en constante duda.
Eróticas escenas de inicio a fin, constantes cuestionamientos, así como disgustos, fueron parte de la trama que poco a poco metió a las decenas de asistentes a vivir el drama de los enamorados, tocando fibras sensibles y provocando calor con lo que interpretaban sobre el escenario, llevándose una fuerte ovación.
Al final, los protagonistas agradecieron la respuesta del público y dieron muestra de agradecimiento a todos, en especial a José Cuevas, quién se sintió halagado por el homenaje realizado en Casa Haas.