Hoy, a escasos días de recibir un homenaje para celebrar su reinado de oro, la señora Avilés se siente muy entusiasmada porque durante los desfiles de Carnaval, lucirá el mismo vestido real que usó durante su coronación hace ya 50 años.
Atenta, en un negocio familiar, acepta la entrevista. El último sol hace sombra en la calle. Ella se ve feliz.
“Estoy tan emocionada como hace 50 años”, expresa la reina de oro, mientras espera paciente el día en que nuevamente el pueblo de Mazatlán le refrendará su cariño, y su nombre quede perpetuado para siempre en el reconocimiento que le entregará el Gobierno de la Ciudad a través del Instituto Municipal de Cultura, bajo la dirección de Raúl Rico González.
El homenaje será el sábado 6 de febrero en el estadio Teodoro Mariscal durante la Coronación de la Reina del Carnaval.
Será una noche fascinante. Minutos antes de la actuación de OV/ y Kabah, Ruth Avilés subirá al escenario para recibir los honores de su pueblo. El brillo de las luces, el despliegue de la pirotecnia y espectaculares cuadros coreográficos marcarán la pauta.
“Felizmente casada con un esposo ejemplar y agradecida con la vida por darle dos lindos hijos y tres hermosos nietos”, la reina homenajeada de cabellos plateados y afable sonrisa, relata algunos de los innumerables recuerdos de su coronación a finales de los 60s.
Menciona el cariño de la gente, el apoyo y la compañía de sus amigos y familiares, el espectáculo del Ballet de Bellas Artes, recuerda cuando el poeta laureado Ricardo Garibay la coronó, la música del trovador Oscar Chávez, la actuación de la Orquesta Sinfónica del Noroeste y sobretodo su vestido.
“Mi vestido era blanco, todo bordado al frente. La cauda era rosa bordada en dorado y plateado; era muy grande, medía como ocho metros de largo. Está muy hermoso mi vestido, ya lo verán el domingo pues me lo voy a poner” comenta llena de emoción la homenajeada.
Por alguna razón Ruth Avilés no pudo asistir a su homenaje por los 25 años de reinado, pero aho