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El cansancio extenuante  después de horas de ensayo, se ve minimizado ante el entusiasmo y motivación de los bailarines que encarnarán a los personajes de este fantástico viaje  protagonizado por Dorothy,  El espantapájaros, El Hombre de Hojalata y el León Cobarde, entre otros  amigos que va encontrando en el camino y que juntos tejen una emocionante historia  colmada de valores como la nobleza, la ambición, la lealtad y la inocencia. Después de haber brillado en la presentación de Alicia en el país de las maravillas y ¿Quién es el que anda ahí? Cri-Cri,  alumnos de la Escuela Municipal de Ballet Clásico del Instituto de Cultura de Mazatlán, bajo la dirección de la maestra Zoila Fernández y  bailarines de la Compañía de Ballet Clásico de Sinaloa, A.C. que  dirige Guillermo Carrillo, están  listos para su próximo  reto, la puesta en escena de El Mago de Oz, este viernes y sábado.
 “El montaje de El Mago de Oz empezó en la semana de pascua. Vamos a recrear toda la historia de este grandioso espectáculo. La coreografía es del maestro Guillermo Carrillo y mía y tenemos dos meses trabajando en ella”, compartió  Zoila Fernández.
La directora de la Escuela Municipal de Ballet, destacó que la participación de seis bailarines profesionales de la Compañía de Ballet de Sinaloa enriquece esta historia inspirada en  la famosa novela para niños.
El Mago de Oz es una producción complicada pues prácticamente toda la escuela  participará en ella y  a pesar de eso, la maestra cubana siente tranquilidad pues tiene a su lado un excelente equipo de trabajo compuesto por Guillermo Carrillo, y las maestras Deli Bernal y Sandra Pérez.
Zoila Fernandez externó, que además de la música, la entrega, virtuosismo y nivel técnico de los bailarines, el público disfrutará una producción escénica de alta calidad, pues la escenografía y el vestuario están hechos por profesionales dispuestos a lograr  que esta presentación sea inolvidable. 
 “La presentación va a ser muy hermosa. La escenografía está hecha por Víctor Canizalez,  un talentoso artista que colabora con el Ballet de Monterrey; la música es una edición instrumental basada en la película de 1939 y el vestuario,  es muy colorido y ha sido confeccionado en el taller de corte y confección del Instituto de Cultura de Mazatlán a cargo de Elisa Espinosa.”
Las clases son rigurosas y las alumnas terminan cansadas despu&eacut

Éste artículo fue publicado en Prensa. .

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