Noche de estrenos resultó la función “Impulso Latente”, programa de fin de cursos donde estudiantes de la Escuela Profesional de Danza de Mazatlán mostraron su avance como bailarines, iluminadores y creadores en el Teatro Ángela Peralta.
Fueron 13 piezas dancísticas creadas en su mayoría por el alumnado, bajo la asesoría de sus docentes, mientras que el maestro Víctor Ruiz, y el israelí Ronen Izhaki, artista invitado gracias al proyecto de intercambio entre la EPDM y la Jerusalem Academy of Musoc and Dance, quien realizó una residencia en el puerto este ciclo escolar, también aportaron obras de su autoría a este programa.
Sobre el escenario más de 20 alumnos utilizaron el lenguaje corporal para expresar de una manera distinta las historias, sucesos, su evolución como artistas, mediante una intensa auto exploración desarrollada en las aulas en la materia Trabajos Creativos, donde encontraron su propia luz desde el movimiento para crear poéticas escenas.
Fueron en piezas como Tótem, Presa, Tumultum, Carroña, Vivantí, Distinto, Abbey, Ausente, Idek, En-Seña-Me, Mundo Olvidado, Roto, y Sudando Lágrimas, donde los estudiantes protagonizaron con solos, duetos, tríos y colectivos, causando gran sensación en los asistentes, quienes además de la danza contemporánea al más alto nivel, quedaron cautivados por la iluminación y las escenografías.
Yael Fernández Moreno, estudiante del sexto semestre y uno de los protagonistas de Abbey, dijo sentirse muy contento con su trabajo y consideró que su paso por la EPDM fue una manera de descubrirse como bailarines y equipo. Su interpretación fue una pieza casi teatral basada en el lip sinc, donde abordaban el amor y a qué sabe conquistar al ser amado, en lo personal el conquistó a más de una persona del público con su mirada.
Raúl Moreno, uno de los tres intérpretes de Vivantí, dijo sentirse emocionado con su participación, pues desde su óptica la pieza fue muy creativa por los elementos que utilizaron como uniformes coloridos, la disfrutó muchos ya que se basaba en el waacking, transportado al contemporáneo, haciendo una obra que se disfruta bailar, algo genuino para él y sus compañeros, producto del talento de la estudiante tapatía Jéssica Arellano.
Al final de cada pieza las ovaciones se dejaron sentir dejando el escenario listo para que este sábado 01 de julio a las 20:00 horas en el Teatro Ángela Peralta, se disfrute la función de