Cinco identidades destacan en la conformación de la población sinaloense percibidas en sus principales actividades económicas, gastronomía, tradiciones y rasgos culturales.
Al disertar sobre “Imágenes urbanas de jóvenes en Mazatlán en los últimos 60 años”, el docente e investigador Ismael Alvarado, destacó que la narco cultura no es un elemento identitario de toda la geografía sinaloense.
Ante un público de distintas edades reunido en la Plazuela Machado, Alvarado fue el expositor principal de “Diálogos de nuestra Historia”, programa impulsado por el Instituto de Cultura de Mazatlán.
Según el investigador en Sinaloa existen cinco identidades: al norte de Nayarit tienen más apego o influencia a lo costero; en Concordia, Rosario, Cosalá, San Ignacio, El Fuerte, hay rasgos de la cultura española, y aun practican algunas actividades como la minería, se trata de una identidad cerrada con pocos cambios sociales y procesos históricos muy marcados.
De Guasave hacia el norte, la agricultura da identidad a la región, hay planeación y organización en los ciclos de siembra, las personas se duermen entre 10 y 11 de la noche y se levantan a trabajar a partir de las 5 de la madrugada.
A los habitantes de Culiacán, la capital del estado, se les identifica como los fiesteros, los aventados, alterados etc.
Antes de los años 60´s, Culiacán estaba dividido por el rio, pero después de los 60 se fue expandiendo, se generó desarrollo económico social y cultural y comenzó a construirse una identidad particular.
La quinta identidad es la de los jóvenes mazatlecos. Mazatlán tiene sus atractivos geográficos y actividades económicas diferentes a otros municipios.
Ismael Alvarado destacó los cambios que ha vivido esta ciudad desde los años 50, 60, 70 y 80, lapso durante el cual pasó a ser un paraíso de hermosas playas, que por sus atractivos llegó a convertirse en lugar favorito de los turistas norteamericanos. El desarrollo de la hotelería en la década de los 80, fortaleció su economía, pero a partir de la década de los 90, según el investigador, el destino comenzó a decaer y se transformó con las influencias culturales de otros lugares.